Frustrada una nueva chance de alzar la “Séptima”, Boca Juniors se concentrará hasta finales de año en una nueva obsesión: asegurar su participación en la Copa Libertadores 2024, objetivo para el que dispone tres vías de acceso.
La primera es la consagración en Copa Argentina, en la que se encuentra clasificado a semifinales, con el cruce pendiente frente a Estudiantes de La Plata, con fecha y sede a definir.
De superarlo, el equipo de Jorge Almirón deberá buscar el título ante San Lorenzo o Defensa y Justicia, protagonistas de la otra semi.
La segunda opción es llegar por la tabla anual, que entrega cupos de Libertadores a los equipos situados entre el segundo y cuarto lugar. De momento, Boca se ubica séptimo con 55 unidades, en zona de Copa Sudamericana.
Este miércoles afrontará un cruce clave para ese objetivo cuando visite a San Lorenzo, sexto con 57. Luego recibirá a Newell’s (50) y en la última fecha se medirá con Godoy Cruz (59), en Mendoza.
La tercera posibilidad, muy improbable, sería consagrarse campeón de la Copa de la Liga. Para ello debe quedar, primero, entre los cuatro mejores de la Zona B.
Actualmente se ubica décimo con 11 unidades, a seis del cuarto (Racing), con nueve puntos por jugar.