Estados Unidos confirmó que no estuvo involucrado en la respuesta de Israel a Irán, pero el Presidente, Joe Biden, reveló que había sido informado previamente sobre el ataque. Ahora, el mandatario manifestó su deseo de que el conflicto en el Medio Oriente desescale: “Parece que solo han alcanzado objetivos militares. Mi esperanza es que esto sea el final”, dijo en una rueda de prensa en Pensilvania, donde tenía agendados varios eventos antes de las elecciones del 5 de noviembre.
El ataque israelí, lanzado en la madrugada de este sábado, causó la muerte de cuatro militares iraníes, según informó las FDI en las últimas horas.
En tanto, el gobierno de Biden persistió en sus esfuerzos diplomáticos para que la respuesta de Israel fuera proporcional y evitara objetivos nucleares o petroleros, lo que podría haber agravado el conflicto. Estas negociaciones fueron respetadas por Israel, que aseguró a través del vocero de las Fuerzas de Defensa (FDI), Daniel Hagari, que fueron atacados “puntos militares estratégicos en Irán”.
En las últimas horas, el mandatario norteamericano continuó recibiendo información sobre la situación en Oriente Medio durante una llamada con su equipo de seguridad nacional y con la vicepresidenta Kamala Harris, informó la Casa Blanca.
En esa llamada, ordenó tomar “todas las medidas necesarias” para proteger a las fuerzas estadounidenses en la región y ayudar a defender a Israel ante posibles respuestas de Irán y sus aliados, detalló la vocería.
Por su parte, Irán está dando señales de que podría no tomar represalias contra Israel, y sus autoridades militares y civiles han asegurado que los bombardeos causaron “daños limitados”. Sin embargo, el régimen iraní mantiene una fuerte retórica, asegurando que no “tiene límites” para defender sus intereses y su integridad territorial.