Luca Prodan nació en Italia, tenia raíces escocesas y que compartió colegio con el Príncipe Carlos de Inglaterra. Se hizo adicto a la heroína y viajo a la Argentina en busca de un poco de paz y estabilidad. Formó Sumo, una banda inédita y fundamental para el rock nacional. En nuestras tierras cambió la heroína por la ginebra, y murió a los 34 años a causa de una cirrosis. Este hombre que podría ser varios a la vez, pero sin embargo fue único, hoy estaría cumpliendo 69 años.
Venerado por miles, cuestionado por algunos pocos, Luca es una figura más que singular dentro de nuestro rock, lejos de los virtuosismos de los maestros pero generador de nuevos sonidos, el importador de la new wave, el reggae y el post punk le dio a la Argentina sonidos que se quedaron con nosotros para siempre.
Sus días oscuros y su llegada a la Argentina
Antes de llegar a la Argentina, Luca la pasó muy mal en Europa, después de escaparse del Gordonstoun School escocés en su último año (hasta Interpol lo estuvo buscando) su mamá lo encontró en Roma, adicto a la heroína y en un muy mal estado emocional. Gracias a un médico que lo declaró “demente” no hizo el servicio militar italiano pero tampoco pudo hacer mucho para salir del infierno en que estaba metido.
De hecho, al tiempo, las cosas empeoraron con el suicidio de su hermana y él también estuvo a punto de morir por sobredosis de heroína; cayó en coma. El destino quiso que el único amigo que se había hecho en Escocia, Timmy McKern, quien tenía familia en la Argentina y se había radicado en las sierras cordobesas, donde formó una familia se su salvación.
Timmy le envió a Luca una carta con una foto en la que estaba con su esposa y su hija pequeña y, de fondo, las sierras. Y lo invitaba a pasar una temporada con ellos. Luca llegó a la Argentina a comienzos de los 80, escapando de su vida en Europa y de la heroína. Y se quedó para siempre.

La vida con Sumo
En Córdoba conoció a Germán Daffunchio y a Alejandro Sokol. Antes de mudarse al barrio inglés de Hurlingham, en Buenos Aires, y darle inicio a Sumo, viajó a Europa por última vez para comprar equipos e instrumentos.
Con Prodan en la voz, Sokol en el bajo, Daffunchio a la guitarra y Stephanie Nuttal, una amiga inglesa de Luca, en la batería, dieron un primer concierto en una discoteca de El Palomar llamada Caroline’s Pub.
La banda estableció su base en la casa de la madre de Timmy en Hurlingham, Provincia de Buenos Aires. Brindaban espectáculos con temas cantados en inglés. Tuvieron serios problemas durante la guerra de Malvinas, cuando todo lo relacionado con el Reino Unido — incluido el idioma — fue prohibido. Esta situación provocó el retorno de Nuttal a su país natal a pedido de sus padres.
La segunda formación de Sumo estuvo integrada por Prodan (voz), Daffunchio (guitarra), Sokol (batería) y Diego Arnedo (bajo). Más tarde se uniría como saxofonista Roberto Pettinato, quien hasta ese entonces era periodista de la revista El Expreso Imaginario.
En 1984, Sokol deja la banda y se suma Alberto “Superman” Troglio en la batería. Al poco tiempo, e invitado por Diego Arnedo, ingresa Ricardo Mollo en guitarra. Ambos eran exintegrantes de MAM. La formación con Prodan, Daffunchio, Arnedo, Mollo, Troglio y Pettinato fue la que se mantuvo hasta la disolución del grupo.
Luca marcó tendencia con su estilo musical, con su impronta y con su imagen: en el contexto de los ochenta ser un rockero calvo resultaba contracultural. A Prodan no le pesó esta situación y terminó marcando tendencia.
De la mano del éxito y la exposición creció su adicción a la ginebra lo que lo llevó a una muerte causada por una cirrosis hepática producto de su alcoholismo a los 34 años. Lo encontraron muerto en la pensión en la que pasó sus últimos días, a la vuelta del colegio Nacional Buenos Aires, el 22 de diciembre de 1987. Sin dudas vivió una vida rápida y a veces extrema, sin embargo esas pausas que dan cuenta de la sensibilidad del artista son las que quedaron para siempre como una marca indeleble en la cultura popular de nuestro país.