Santiago del Moro ingresó en la casa de Gran Hermano este miércoles por la noche, del mismo modo que lo había hecho en la edición anterior, donde fue recibido por Marcos Ginocchio, Julieta Poggio y Nacho Castañares. En esta oportunidad, los finalistas que cenaron con el conductor fueron Bautista Mascia, Emmanuel Vich y Nicolás Grosman, que compiten por alzarse con el premio mayor el próximo domingo.
Entre la comida y los videos sobre la repercusión del reality en el público, Del Moro detalló a los tres finalistas los premios que les serán otorgados, de acuerdo al puesto en el que queden con la votación telefónica. En este sentido, les contó que el ganador recibirá 70 millones de pesos, una casa y una moto, mientras quien quede en segundo lugar obtendrá 10 millones de pesos y una moto. En tanto, quien termine tercero se llevará 5 millones de pesos y una moto.
Inmediatamente, los fans comenzaron a reaccionar en redes sociales, dado que -al inicio de la temporada- el conductor había especificado que los tres finalistas ganarían una casa. Al parecer, en el transcurso de la competencia, la producción cambió lo previamente establecido, causando la indignación de los seguidores del programa y la desilusión en uno de los jugadores: Emmanuel Vich.
Decepcionado, el estilista señaló: “Aparte de llegar a la final, por una meta personal, el objetivo era otro. La casa era parte de mi sueño. Te juro por Dios que pensaba que llegaba la casa, amigo. Vamos a quedar re pelotudos con la gente hablando de esto. Espero que no se entiende mal, no es que estamos desagradecidos, pero…”, sostuvo.
Ante esto, Bautista trató de calmarlo: “Ya fue, amigo, esperá al domingo”, dándole a entender que bien podría ser él el ganador y ahí podría obtener el tan ansiado premio.