La motosierra de Milei tuvo un amplio abanico. Los tijeretazos no solo fueron en su gabinete y en empresas estatales, sino también le llegó a las jurisdicciones provinciales como el recorte de los subsidios al transporte, fondos educativos y la “caja política” de transferencias discrecionales.
En este último ítem, todas las jurisdicciones del país perdieron, salvo Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que registró una suba interanual real entre el 2023 y el 2024 del 33,7 por ciento, pasando de $ 150.084 en 2023 a $ 652.801 el año pasado.
En el caso puntual de Chubut, el reparto de fondos discrecionales jamás trajo “algo de justicia” por lo que aporta y lo que recibe por los canales “legales”, como es el caso de la Coparticipación Federal de Impuestos.
Pero en este último año, en el Gobierno de “Nacho” Torres en Chubut y de Javier Milei como presidente de la Nación, las desigualdades y las asimetrías se pronunciaron más en materia de transferencias no automáticas.
Es cierto que, no solo Chubut fue perjudicada en este segmento, por el contrario, de las 24 jurisdicciones del país, 23 perdieron un gran volumen de recursos como consecuencia de la motosierra y bajo el lema del “superávit fiscal”.
Chubut recibió desde enero de 2024 hasta diciembre del mismo año un total de 8.342 millones en concepto de transferencias discrecionales.

Mientras que en 2023, cuando el signo político provincial era del mismo color que el nacional, las transferencias no automáticas ascendieron a $ 14.913 millones.
De esta manera, la caída interanual entre 2023 y 2024 en Chubut fue del -79,80 por ciento.
Sacando el caso de Ciudad Autónoma de Buenos Aires, hubo una sola provincia más que recibió más fondos discrecionales en 2024 que en 2023, aunque contabilizando la inflación, también marcó una caída.
Se trata de Neuquén, que en 2023 embolsó $ 45.834 millones, mientras que el año pasado cerró con $ 55.895 millones, marcando una merma interanual real del -61,7 por ciento.
CAÍDA, JURISDICCIÓN POR JURISDICCIÓN
Las mayores variaciones negativas se registraron en La Rioja (-98,1%), La Pampa (-96%) y Formosa (-95,9%), tres provincias gobernadas por mandatarios peronistas fuertemente opositores: Ricardo Quintela, Sergio Ziliotto y Gildo Insfrán, respectivamente.
Le siguen en el porcentaje de caída real interanual en los giros no automáticos pagados San Luis (-93,8%), Santa Fe (-92,80%), Río Negro (-91,20%), San Juan (-90,90%), y Catamarca (-90,50%).
Las que sufrieron menor recorte en las transferencias discrecionales respecto de 2023, a valores reales, fueron Neuquén (-61,7%), Santa Cruz (-69,3%), Jujuy (-70,2%) Mendoza (-79,2) y Chubut (-79,80), conducidas por gobernadores de fuerzas provinciales (el neuquino Rolando Figueroa y Claudio Vidal de SER Santa Cruz), o pertenecientes a la UCR (el mendocino Alfredo Cornejo y el jujeño Carlos Sadir) o el PRO (el chubutense Ignacio Torres).
En números absolutos, en segundo lugar en el ranking de mayor asistencia en 2024, después de CABA, se encuentra Buenos Aires, con un total de $400.941 millones, cifra que se redujo un 84,3% respecto de 2023, cuando había recibido $827.795 millones.
Le siguen en monto total de las transferencias discrecionales Neuquén con $ 55.895 millones, Santa Cruz con $ 30.773 millones, Tucumán $ 28.220 millones, Chaco con $ 28.087 millones, Misiones con $ 25.549 millones, Salta con $ 24.644 millones, Córdoba con $ 23.263 millones y Mendoza con $ 2.522 millones, con reducciones a valores reales de entre el 60 y el 80% respecto de 2023.