Mauricio Macri enfrentó este domingo la primera derrota electoral del PRO en la Ciudad de Buenos Aires en 20 años. Un fracaso que amenaza con dejarlo fuera de juego en el territorio que lo vio surgir y que lo debilita en el mano a mano de las negociaciones con Javier Milei y La Libertad Avanza.
El resultado en CABA fue además la primera derrota de un oficialismo local en las seis elecciones que se realizaron este año y abre interrogantes respecto de lo que pueda suceder en septiembre en la provincia de Buenos Aires.
Así, la elección porteña dejó varios análisis posibles. Por un lado, casi siete de cada diez porteños eligió a una fuerza política de derecha y centroderecha para la renovación de la Legislatura porteña, frente a los seis que lo habían hecho en 2023.
Pero el buen desempeño de Leandro Santoro, aunque con un resultado menor al esperado, le permitió al peronismo quedarse con la primera minoría y la mayor cantidad de bancas, 20 de las 60 a partir del 10 de diciembre.
Esa nueva correlación de fuerzas obligará al macrismo a buscar aliados en otras fuerzas políticas para conseguir que avancen sus iniciativas, un escenario al que está acostumbrado desde las últimas elecciones.
Pero también este domingo confirmó el análisis de las cinco elecciones anteriores: el PJ dividido no pudo ganar en ninguna jurisdicción, frente a un Javier Milei fortalecido en los grandes centros urbanos y con el electorado de clase media y más acomodada a su favor.
La lectura que afianza LLA es que se adueñaron de la representatividad antikirchnerista y si el PRO quiere mantenerse en esa posición deberá sumarse al sello de Javier Milei y bajo las reglas de Karina Milei.
Fuente: TN
