Martínez se convirtió en un eslabón central en la cadena de resultados y en el primer objetivo del aurinegro: Llegar a disputar la final del ascenso a primera división.
Deportivo Madryn amagó el año pasado con ascender tras un buen desempeño en la zona de grupo, pero quedó en el camino tras caer en el reducido. Faltó poco, pero fue una advertencia. Algo estaba germinando en el equipo y que terminó de desarrollarse con la llegada de Leandro Gracián como técnico y un grupo de jugadores con experiencias.
En este último lote, aparece aparece Diego Martínez, estandarte del equipo y pieza clave en el andamiaje futbolístico de Deportivo Madryn.
LOS PRIMEROS PASOS DE MARTÍNEZ
El lateral izquierdo de 33 años dio sus primeros pasos en la Reserva del Millonario. Participó en la Copa Libertadores Sub-20 de 2012, donde se consagró campeón tras ganarle al Defensor Sporting de Uruguay. Más tarde, debutó con la camiseta del club de Núñez el 16 de mayo de 2012 en los cuartos de final de Copa Argentina ante San Lorenzo.
En ese momento, el técnico de River Plata era uno de los máximos ídolos de la institución: Ramón Díaz, quien contaba con un plantel muy competitivo. En este contexto y con poco lugar en el equipo, decidió salir del club para sumar minutos en el fútbol del ascenso.
En la segunda categoría del fútbol argentino, Martínez jugó en Sarmiento, Patronato, Estudiantes de San Luis, San Martín de Tucumán, Nueva Chicago, Villa Dálmine y Almagro.
En medio, tuvo un corto recorrido por la MLS en 2016. Más precisamente en el New York City donde se dio el lujo de jugar al lado de figuras de la talla de Andrea Pirlo, David Villa y Frank Lampard.
PIEZA CLAVE EN LA DEFENSA
Martínez jugó 30 partidos con el aurinegro en lo que va del año y convirtió un gol frente Los Andes.
La defensa de Deportivo Madryn fue una de las más regulares durante la temporada, con tan solo 28 goles en contra en 34 partidos, estableciendo de esta manera una estadística de menos de un gol por partido.
En este escenario, la experiencia de Martínez fue clave junto a la de sus otros compañeros en la zaga defensiva. El lateral izquierdo se ganó rápidamente el cariño de los hinchas aurinegros y en una pieza clave para el equipo dirigido por el “Tano” Gracián.